Un repaso a los jugadores que han protagonizado los líos extradeportivos más sonados del 2015
2015 ha sido un año que no solo
nos ha dejado grandes actuaciones en una cancha de baloncesto, también momentos
peculiares fuera de ella. Estos son algunos de los malos ejemplos de cómo un
jugador de élite, llámese ahora "vaya pieza o elemento", puede ser una mala influencia para sí mismo y
para los demás. Algunos hechos los denunciamos, otros nos solidarizamos e
incluso con algunos nos reímos.
"Reincidentes: no hay dos
sin tres"
Ty Lawson, jugador de los Houston Rockets, fue pillado conduciendo
bajo los efectos del alcohol la semana pasada. Se trata de la tercera vez en
este 2015 que el base es detenido por la policía en la misma situación.
El primer arresto se produjo en enero, cuando
Lawson jugaba para los Denver Nuggets y fue cazado a alta velocidad. Los policías
que le detuvieron quisieron hacer el test de alcoholemia al jugador, pero este
se negó y acabó esa noche en el calabozo. La segunda fue este verano, en julio,
un poco antes de ser traspasado a los Rockets, cuando el alcoholímetro subió
más del nivel permitido. Lawson pasaba sus vacaciones en Los Angeles y evitó la
cárcel pagando una fianza de 5.000 dólares.
Los Nuggets se cansaron de él,
igual que ahora lo están los Rockets. El equipo texano no está viendo los
resultados esperados, y si a ello le sumas los problemas que el base tiene con
el alcohol, han hecho que desde la franquicia le estén buscando desesperadamente
un traspaso. Sin embargo, ningún equipo de la NBA quiere fichar al base, más
protagonista por sus acciones fuera de la pista que dentro.
Otro que no aprende del primer
error y sigue estirando la goma de las oportunidades es Al Jefferson. El pívot de los Charlotte
Hornets ha sido recientemente suspendido con cinco partidos por consumir
marihuana. Se trata de la tercera vez que el pívot da positivo por dicha
sustancia en un control anti-drogas. Jefferson perderá más de 600.000 dólares
por no jugar esos partidos. Ha pedido públicamente perdón, pero desde los
Hornets están muy atentos para que la tercera sea la última y definitiva.
"A la chita callando"
La gran sorpresa de la lista es Jahlil Okafor. El pívot, campeón con la
Universidad de Duke y elegido en el nº3 del último Draft por los Philadelphia
76ers, saltó a la palestra con una pelea el pasado 26 de noviembre. Okafor
salía de un club nocturno en Boston cuando tuvo un encontronazo con un
aficionado de los Celtics que le gritaba "los Sixers apestan". Lejos
de no hacerle caso, Okafor se enzarzó en una pelea con el joven y un teléfono
móvil recogió todas las imágenes.
"Es algo de lo que estoy
avergonzado", dijo Okafor tras conocer que el vídeo lo había hecho público
el medio estadounidense TMZ. Al día siguiente, otro vídeo salía a la luz, con
Okafor propinando unos cuantos puñetazos a otro joven esa misma noche.
"Aunque estamos
decepcionados por sus recientes acciones, tenemos esperanza en que sea un
valioso miembro de los Sixers", rezaba el comunicado del club tras
imponerle un castigo de dos partidos, lo que supone una pérdida de 80.000
dólares en su salario.
Todo podría haber quedado ahí.
Sin embargo, varios periodistas empezaron a tirar de la manta y a descubrir que
el "bueno" de Okafor ya la había liado anteriormente. En octubre, en
un club de Philadelphia, tuvo otra pelea en la que incluso fue amenazado con
una pistola en la cabeza. Al mes siguiente, fue pillado en otro pub de la
ciudad utilizando un DNI falso para entrar. Y como guinda, tres semanas antes
del incidente de Boston, fue detenido al conducir en una vía de 64km/h a 174.
Al jugador le molestó que sacaran
todo de golpe y en sus redes sociales afirmó: "Soy dueño de mis
decisiones", añadiendo que "no quiero ser una distracción para el
equipo". A su defensa salió su entrenador en Duke, Mike Krzyzewski,
asegurando que "es uno de los mejores chicos que he conocido", y
hasta Kobe Bryant: "Mi teléfono siempre estará abierto para él". Kobe
además apunta que muchos de los jugadores que están en la NBA cometieron esos
errores, y que es la inmediatez y el avance de las tecnologías lo que han hecho
que ahora esos errores se conviertan en noticia rápidamente.
Los Sixers además le han puesto
un hombre de seguridad para que salga sin protagonizar nuevos escándalos por la
ciudad. Okafor, al más puro estilo "a la chita callando", se ha
convertido en uno de los 'bad boys' de la NBA.
"Estar en el lugar
equivocado en el momento equivocado"
Otro de los incidentes
extradeportivos más sonados del año tuvo lugar en un club neoyorkino. El pasado
abril, Chris Copeland, el entonces
jugador de los Indiana Pacers y que actualmente milita en los Milwaukee Bucks,
fue apuñalado en el abdomen en una pelea en la que su mujer también resultó herida.
Eran las 4 de la mañana y en la misma discoteca, pero sin nada que ver con
Copeland, se encontraban dos jugadores de los Atlanta Hawks: Thabo Sefolosha y Pero Antic.
La policía llegó rápidamente para
desalojar el recinto. "Sefolosha estaba dando dinero a un sintecho en la
salida cuando la policía le tiró al suelo", relata Antic, que se acercó a
recriminar la acción a uno de los policías y también fue estampado contra el
asfalto neoyorkino. Los dos fueron detenidos por "obstruir la labor
policial". Sin embargo, lo más
notable es que, en aquel rifirrafe sin venir a cuento, Sefolosha se rompió el
peroné. Los Hawks estaban a punto de comenzar los Play Offs, y el jugador se
perdería el resto de la temporada. "Estar en el lugar equivocado en el
momento equivocado", resumía Antic.
El suizo no lo dudó un momento,
llevó el caso a juicio y hace apenas un par de meses fue declarado inocente de
todos los cargos. Todavía no se reconoce que fue la policía quien lesionó al
jugador, pero Thabo está completamente limpio. Un ejemplo de que hay cuidarse de
estar en ciertos lugares a ciertas horas.
Precisamente, el jugador que
cubrió la baja de Sefolosha ha tenido también problemas con la policía este
verano. Mike Scott, de los Atlanta
Hawks fue detenido por tener en su
coche MDMA y marihuana. Se ve que Scott aprovechaba las vacaciones a su
manera...
"Lío de faldas"
Fue la noticia extradeportiva más
destacada de la pretemporada: "Matt
Barnes saca a patadas a Derek Fisher
de la casa de su exmujer". Pongámoslo en contexto.
Gloria Govan, exmujer de Matt
Barnes, jugador de los Memphis Grizzlies, mantiene una relación sentimental con
Derek Fisher, entrenador de los New York Knicks. En uno de los días libres del
'training camp', Fisher decide ir a pasar la noche a casa de Govan, en la que
se encuentran también sus dos hijos, cuyo padre es Barnes. Este último comienza
a hablar con sus hijos y se entera de que Fisher está allí. No lo duda un
momento: coge el coche y conduce durante 150 km para llegar, sacar
literalmente a patadas a Fisher y escupir en la cara de su exmujer. "No lo
hice por celos, lo hice por mis hijos", dijo luego Matt Barnes.
Los dos fueron compañeros en Los
Angeles Lakers entre 2010 y 2012, aunque la relación, como es evidente, se ha
roto: "éramos buenos amigos", dice Barnes, a lo que se justifica de
la pelea diciendo que "era un asunto para arreglarlo entre hombres, pero
él prefirió llamar a la policía y a la NBA". Barnes asegura también que se
encontraba a quince minutos de la casa, y no a hora y media como apuntaron
varios medios. El jugador, que no tiene especialmente un buen trato por parte
de los aficionados, se convirtió en el objetivo de los fans, quienes le gritaban: "¡Derek Fisher!" cuando pisaba una cancha.
Por su parte, Fisher no dio
ninguna declaración sobre su versión de los hechos, aunque se volverán a ver
las caras este próximo 16 de enero cuando los Grizzlies visiten el Madison
Square Garden. Un duelo, sin duda, muy morboso...
"El más listo de la
clase"
Es lo que Jeff Adrien pensó sobre sí mismo. El jugador, actualmente sin
equipo, pero que jugó para los New Orleans Pelicans la pretemporada y sonó este
verano como fichaje para el Real Madrid, estaba en la entrada del hotel 'West
Hollywood' en Los Angeles cuando vio un Mercedes en la puerta, lo cogió y se
dio un paseo de seis horas por la ciudad californiana. Llevando al extremo la
expresión 'hacerse el sueco', volvió con el coche al hotel y lo dejó en el
mismo sitio donde lo había "cogido prestado", que diría Adrien. El
dueño, que había denunciado el robo, dijo después que su coche apenas había
sufrido daños, aunque olía bastante a marihuana. Adrien se pasó de listo y fue detenido con una multa de 25.000 dólares.
"El fuera de la Ley"
Como Clint Eastwood en la mítica
película western, así se tuvo que sentir Robert
Swift (el de la imagen de portada).
El extravagante pívot, que se parece a Chris Andersen por la multitud de tatuajes que cubren su cuerpo, jugó para los Seattle Supersonics y siguió con la franquicia en su mudanza a Oklahoma. Hace casi un año, el pasado mes de enero, fue detenido al intentar robar, con arma y un antifaz, una casa rural del estado de Washington. Swift estaba en el objetivo de la policía por no presentarse a juicio meses antes por cargos de posesión ilegal de una escopeta recortada. Sin embargo, ahí no queda todo, y es que Swift se excusó del atraco ante la policía: "estoy drogado", les dijo al ser detenido junto a un compañero.
El exjugador, de 30 años, arrastra un historial muy conflictivo y que supera con creces lo
conseguido en una cancha. Por ejemplo, en 2013, tuvo que desalojar su casa de
Seattle por problemas económicos, después de haber ganado más de 20 millones de
dólares en la NBA. La figura de delincuente supera ya a la de exjugador.
"Mejor solo que mal
acompañado"
Pensaría Derrick Williams, jugador de los New York Knicks.
Williams salió
por la Gran Manzana a celebrar la victoria frente a los Sixers el pasado 19 de
diciembre. En un club conoció a dos chicas, a las que invitó a pasar la noche
en su casa. "Noche redonda" pensaría el bueno de Derrick, hasta que notó
que algo de valor le faltaba en casa: las chicas habían robado una bolsa con joyas
valoradas en 750.000 dólares. Queda claro que Williams se pensará dos veces la
próxima vez que quiera llevar una chica a casa.
"De tal palo tal
astilla"
Scottie Pippen, campeón en seis ocasiones como escudero de Michael
Jordan en los Chicago Bulls y oro olímpico como integrante del Dream Team en
Barcelona '92, ganó unos 120 millones de dólares en los 17 años que jugó en la
NBA, pero aplicando aquello de que "el dinero está para gastarlo", se
fundió todo su capital en compras desmedidas, además de malas inversiones.
Pippen con 42 años se fue a Finlandia y Suecia para jugar al baloncesto y ganar
un dinero que le resolviese los problemas económicos. Sin embargo, por ahí no
va la cosa, ya que este año la gran protagonista en la familia Pippen ha sido
su hija.
Sierra Pippen, de 20 años, iba más que contenta por las calles de
Iowa City cuando decidió entrar en el Hotel Sheraton de la ciudad, orinar en
medio del vestíbulo y salir como si nada. Fue arrestada y llevada a comisaría
para poner el apellido Pippen de nuevo en las noticias por temas
extradeportivos.
"Lamar Odom parecía Uma
Thurman en Pulp Fiction"
Fueran las duras palabras con las
que el dueño del prostíbulo de Las Vegas definió a Lamar Odom el día que fue
hallado inconsciente por una sobredosis de cocaína y estimulantes sexuales. Fue
una consecuencia de un camino infernal por el que caminaba el que fuese dos
veces campeón de la NBA con Los Angeles Lakers.
En 2013 ya ingresó en una clínica
de desintoxicación por su adicción al crack, y este último año sufrió las
muertes de familiares y de dos amigos cercanos en el mes de junio, además del
divorcio con Khloe Kardashian. Todo ello le condujo a una depresión que estalló
aquel 13 de octubre en un burdel de la capital del vicio.
Odom estuvo en coma, pero ya
mejora. Puede caminar y ha recuperado gran parte de la memoria. La NBA se
solidarizó con uno de los grandes jugadores que han pasado por la Liga, y se
plantea crear algún tipo de programa que ayude a los exjugadores a salir
adelante tras dejar el baloncesto.
"Cuando la noche
confunde"
Para acabar este artículo de una
forma más amena y divertida, viajamos a Francia, concretamente a Limoges, donde
el jugador alemán del equipo local, Heiko
Schaffartzik, se convirtió por un día en la comidilla de los habitantes de
la pequeña ciudad.
El internacional alemán salió un
sábado a quemar la noche francesa. Poco que celebrar y más que olvidar tras dos
derrotas esa semana en Euroliga y en Liga Francesa. Se ve que se pasó un poco
con las copas y quiso olvidar más cosas. A la mañana siguiente, una pareja se
despertaba en su casa y encontraba al escolta tumbado en su sofá. Heiko, de
borrachera a altas horas de la noche, se había equivocado de domicilio (y me pregunto: ¿Cómo consiguió entrar en la casa?).
La familia se lo tomó con humor y
no denunció, aunque el club le impuso un castigo económico. Schaffartzik es un
jugador muy querido en el país galo, ya que ha sido el más votado junto al
exNBA Rodrigue Beaubois para disputar el All Star de la liga francesa, y seguro
que quedará como un gracioso momento a recordar para la comunidad de Limoges.
Edu Salán 24
diciembre 2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario